El día de la madre

Hoy ha sido un día muy especial. Claudia me trajo flores para felicitarme por el día de las madres. Después, Antonio y ella se fueron al parque y yo me quedé recogiendo un poco la cocina ya que la madre de Antonio venía a comer. Así que adelantamos el almuerzo para que Claudia pudiera comer con nosotros.

Antonio fue a comprar pollo asado y unas patatas con pimientos para mí (yo no como carne). Claudia ayudó a poner la mesa, trajo las servilletas, los tenedores... Le pusimos la trona a la altura de la mesa y se lo pasó genial. Comió pollo y patatas fritas ella solita ya que sabe manejar bastante bien el tenedor y la cuchara.

Mi suegra ha alucinado, ya que ella está acostumbrada a ver a mi sobrino que es malísimo comiendo. Y ver a Claudia comer sola sin necesidad de regañar ni insistirle es, para ella, toda una experiencia.

Yo, de todas formas, me niego a comparar a un crío con otro y menos por el tema de la comida. Como decía un artículo que leí, cada niño come una cantidad diferente y sobre todo hay que tener mucha paciencia porque a veces pueden tardar hasta 1 hora en comer. Hay veces que Claudia tarda "poquito" en comer y otras veces hay que echarle paciencia.

De todas formas, es una pasada ver con que gusto come Claudia.